Cocinando de a 2
Tengo el agrado de ofrecerles en éste espacio, una técnica rara pero no menos original, de limpiar los pisos. Me la enseño mi amiga Milagros, la última vez que me invitó a comer a su casa y me hizo cocinar...
Lean y aprendan:
Introducción
Antes de implementar la técnica, es necesario, aunque no indispensable, estar cocinando con una amiga. Bah! cocinando es una forma de decir. En realidad basta con estar mirando como la amiga se caga llorando mientras pica finamente la cebolla para hacer la salsa ( me pregunto si la técnica mejorará cuando es la segunda vez en una semana que invitás a tu amiga a comer y la hacés cocinar...) En fin, la amiga pica la cebolla sobre una tabla a medio apoyar en la mesada. Se cumple, como siempre, la ley de Murphy y gracias a un mal movimiento de la novata pero talentosa cocinera la tabla pierde el equilibrio, y toooooodos los pedacitos de cebolla se desparraman en el piso. Y... aca viene Milagros:
PASO 1:Tome una cuchara y ayudándose con la mano, ayude a su amiga a juntar la cebolla y colocarla en un bols (el proceso de la cebolla están en el blog de Mili)
PASO 2: Tenga listo el palo de piso, secador, estropajo o como usted le llame, para "barrer" los trocitos de cebolla que quedaron abandonados por la paciencia de su amiga, moviéndolos hacia el centro de la cocina, donde los recogerá con una servilleta de papel tissué.
PASO 3: Busque el trapo de piso y resérvelo a un costado
PASO 4: Tome el envase de Desodorante para pisos y con delicadeza desparrame 5 o 6 gotitas sobre la zona afectada al ácido cebolleico.
PASO 5: Sírvase de algún recipiente, preferentemente un vaso (por la medida, vio?) y coloque en el mismo tres cuartos de agua, luego vuelque el líquido elemento sobre las gotitas de desodorante de pisos que ya tiene dispuestas en el piso, a razón de un sexto del agua por cada gotita.
PASO 6: Distribuya los elementos dispuestos en el piso, ayudándose con el trapo ya colocado en el escurridor, con el ensamble clásico para limpiar pisos, hasta que consiga el grado de limpieza que le guste, o que la técnica le permita.
PASO 7: Retírese a un costado, sin pisar la obra de arte.
PASO 8 (Opcional): dispóngase en la zona seca del piso, con las rodillas y las manos apoyadas (cual perrito), flexionando los codos hasta que su cabeza quede a un centímetro del piso, y sople hasta que se seque.
CONSEJITO EXTRA: Búsquese un marido lo suficientemente adinerado como para que pueda pagarle una mucama cama adentro, para que nunca más tenga que someterse a semejante tarea... yo sé porqué se lo digo...